Cuando se quiere, se encuentra la forma de entrar, de hablar, de escuchar y hasta de entender al otro. Son muchas las ocasiones, en las que la persona que tenemos delante, nos lo pone difícil para poder conectar. A veces, nos cuesta querer a las personas que más queremos, y es en esas ocasiones cuando debemos pensar, que seguramente, sea cuando más nos necesite. De ahí esa frase tan bonita » Quiéreme cuando menos lo merezca, porque será cuando más lo necesite». Cualquier momento es bueno para trabajarnos, para reinventar, para sacar todas las cualidades que tenemos y mejorarnos, encontrar la forma y disfrutar. Como en la imagen del erizo, siempre existe esa forma de acercarnos, de estar, de querer. Pero hay que tener muy presente, que se quiere «querer querer».
«Quiéreme cuando menos los merezca, porque será cuando más lo necesite»
Cuántas son las veces, que nosotros mismos castigamos a los demás no dejandoles acercarse, poniendo barrea para que no puedan estar. Y cuántas, ellos esperan, perdonan y entienden. Las relaciones humanas son posiblemente, uno de los actos de amor más potentes que conozco, en el que se da, se recibe, se espera, se conecta y se retro-alimenta. Querido/a lector/a, cuando se quiere, se encuentra la forma. Que no te decepcione si te cierra la puerta un día, si no entiendes…se calmo, encontrarás la forma. Ahí tendrás también la manera de sacar tus fortalezas y de ir ablandando poco a poco ese caparazón, ese escudo o esas púas que tenga el otro. Desde la paciencia, desde el amor y desde el espacio. Seguramente nadie lo había querido como tú, y le es extraño entender. Quizá seas una persona demasiado intensa por el momento.
Todo llegará.
Marisa Martínez Gurrea
Coach personal
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